Recientes casos como el de Jerónimo Angulo, de tres años y el de Dylan Santiago, de dos años, víctimas de desaparición, violencia sexual y homicidio, reflejan la reprochable situación que viven los niños, niñas y adolescentes en el país, declaró la Procuraduría General de la Nación al expresar su preocupación teniendo en cuenta que 607 menores de edad murieron de manera violenta en el 2023.

El Ministerio Público expresó su preocupación frente a las formas de violencia física, sexual o psicológica contra menores de edad, conductas que causan sufrimiento e incluso la muerte, declaró, tras agregar que en el mismo periodo de análisis, 69.660 niños, niñas y adolescentes ingresaron al programa del ICBF porque sus derechos fueron vulnerados.

De las 607 muertes violentas, la mayoría adolescentes (531), fueron víctimas 47 en etapa de primera infancia y (29) en infancia; periodo en el que también se registraron 280 casos de suicidio.

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En enero de 2024, (44) fueron los casos reportados por lesiones fatales, 40 de los cuales fueron de adolescentes.

De acuerdo con el Boletín Estadístico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, reportó  69.660 niños, niñas y adolescentes, con Procesos de Restablecimiento de Derechos (PARD), en su mayoría por Omisión o negligencia con 18.523, violencia sexual 18.420, permanencia en calle 4.299, abandono 3.478, violencia física 2.020 y violencia psicológica 1.173.

También alertó que en medio de esta panorama violento, siguen siendo víctimas, muchas veces por parte de sus padres y cuidadores que debiendo ser el primer entorno protector, los someten a violencia física, sexual y psicológica, además de situaciones de acoso escolar, negligencia y abandono infantil.

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Advirtió que las uniones tempranas, matrimonios forzados y serviles, la situación de alta permanencia en calle y trabajo infantil, el reclutamiento forzado, entre otros, también son contextos de riesgo que requieren toda la atención de la institucionalidad.

En consecuencia, la Procuraduría pidió acciones inmediatas a las autoridades para obtener resultados eficaces y disminuir los factores de riesgo y enfatizó en que los menores de edad deben ser protegidos por sus padres, la sociedad y el Estado.

Citó estadísticas de la Policía Nacional, la violencia intrafamiliar registró cifras preocupantes, ya que, del total de los 12.532 casos en el 2023, los infantes fueron los más afectados con 7.663, seguido por los adolescentes con 4.869. Entre enero y febrero de 2024 fueron reportados 1.244 casos, de los cuales 654 corresponden a infancia, seguido por casos en adolescente con 590 registros.